Para una Pyme, la decisión entre quedarse con el software 2D/3D no paramétrico o cambiar a uno de igual o mayor calidad puede socavar tarde o temprano en problemas, tales como una integración demasiado temprana, o dedicar muchos recursos iniciales sin la formación adecuada, los resultados obtenidos no son satisfactorios y además tardíos. La elección implica dejar atrás en un 60% un proceso de diseño automatizado 2D, pero en esto las Pymes no son conscientes.
Hay que entender que de igual forma se tomaron medidas estándares para agilizar la labor de diseño en 2D y este requirió su tiempo. La elección de afrontar un cambio a un software 3D paramétrico también requiere ese tiempo y posiblemente más.
El resultado final, es que no solo obtienes las mismas ventagas, sino también recursos adicionales integrados, que con anterioridad son por separado y no estaban al alcance.